61 voces conscientes Con el tiempo, estas dos jóvenes, que tanto amor habían puesto en la elaboración de su aceite, han crecido profesionalmente y se han convertido en expertas. Lo que comenzó como una necesidad se convirtió en una vocación, incorporando criterios como salarios justos, calidad del producto, buenas prácticas en la producción… Empresas como la suya devuelven el respeto y cuidado que la planta se merece. ¿Cómo surge la empresa? Hace aproximadamente siete años, buscando mejorar la calidad de vida de un ser amado, mi abuelita. Ella sufría dolores articulares, sobre todo en la cadera. Alguien de la familia nos dijo que podíamos ayudarle con CBD, con cannabis. En ese entonces, en Colombia aún no era legal, sin embargo, de forma artesanal, por medio de los indígenas, lo podías conseguir, así que comenzamos a usarlo en ella. Ella comenzó a sentir que mejoraba su calidad de vida. Nosotros, mis hermanos y yo, comenzamos a hacer una investigación sobre el uso y los beneficios de la planta. Una vez es legal en Colombia, a partir del año 2017, comenzamos a sacar todas las licencias para poder sacar el producto o seguir investigando. En el año 2018 nos fueron otorgadas las primeras licencias. Cannabissalud cuenta con las licencias de cultivo psicoactivo, cultivo no psicoactivo, licencia de fabricación de derivados, licencia de uso de semilla de siembra Ella comenzó a sentir que mejoraba su calidad de vida
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