50 activismo términos de control e implementación de CanG, así como a implicaciones más amplias para la seguridad en sus jurisdicciones respectivas. Una vez expresadas las preocupaciones del Bundesrat, se procedió a la primera lectura en el Bundestag, que fue una de las grandes puestas en escena del debate político y una muestra de las posiciones partidistas. En esa sesión, el ministro federal de Salud, Karl Lauterbach, destacó las deficiencias del enfoque prohibicionista en materia de drogas, resaltando el aumento del consumo a pesar de la aplicación de la vía punitiva. Este debate se trasladó a la Comisión de Salud, donde se trabajó el texto legislativo y se consultó en dos ocasiones a la sociedad civil en audiencia pública de la comisión, mecanismos conocidos como procesos de escucha. Finalmente, el texto se aprobó por el pleno de la cámara el 23 de febrero de 2024, con 633 votos a favor y 407 votos en contra, con pocas modificaciones sobre el texto original. Algunas consideraciones del proceso legislativo Hay algunas consideraciones respecto a este proceso que cabe resaltar. Primero, la valentía política de la coalición de Gobierno pese a las dificultades y las críticas de la oposición. El acceso a la sustancia por una vía legal otorga un grado significativo de autonomía y control al consumidor sobre su suministro de cannabis. Esta disposición reconoce el derecho a la autogestión y la autonomía personal en el ámbito de la salud, promueve la reducción de la dependencia del mercado ilegal y garantiza un mayor control sobre la calidad de los productos consumidos. Segundo, este paso constituye el inicio del camino hacia un enfoque pragmático hacia la gestión de drogas recreativas por parte del Estado federal alemán y marca una tendencia hacia enfoques de reducción de daños y políticas basadas en los derechos de las personas consumidoras de drogas en Europa. Si la experiencia alemana demuestra ser exitosa en términos de reducción de daños, disminución del mercado ilícito y generación de ingresos fiscales, es probable que otros países consideren adoptar medidas similares. Esto podría llevar a un cambio gradual hacia una mayor tolerancia del cannabis en toda Europa. Sin embargo, a pesar de los avances hacia una mayor apertura, el proceso ha generado críticas significativas que merecen ser consideradas. Se ha señalado que ha habido pocas cesiones a la sociedad civil durante el desarrollo del proceso legislativo. La participación activa de la sociedad civil es crucial en cualquier proceso que afecte a cuestiones sociales y de salud pública, como es el caso de la regulación del cannabis. La falta de una consulta más amplia con organizaciones representativas podría resultar en una regulación que no Al margen de las críticas, el reciente avance del proyecto de ley sobre regulación del cannabis en Alemania constituye un avance significativo en el continente europeo
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