El Cultivador 66

69 voces conscientes médicos y biólogos de reconocida y reputada experiencia. Estudios que, en la sociedad que conocimos, y que denominaré “a. C.”, costaba años y esfuerzo concluir y, en la actual sociedad en transición, son superados en pocos meses gracias al estudio profundo de artículos en periódicos, notas de prensa y mensajes en redes sociales; sin olvidar los vídeos de YouTube y las noticias de televisión. De la misma manera, investigaciones que, en la sociedad a. C. necesitaban años, incluso lustros, en llegar a conclusiones sustentadas por evidencias, hoy día, gracias a la vertiginosa urgencia de los tiempos actuales, cuentan con validación internacional en cuestión de meses. En los centros escolares, la simbología de la sociedad que se va apuntando predomina sobre los conocimientos que deben aprenderse. Termómetros en forma de pistola midiendo, a base de disparos en la frente, la temperatura de una fila de menores que esperan cual corderitos; bocas y narices tapadas hasta los ojos; barreras invisibles que impiden jugar y tocarse a niños y niñas cada vez menos ansiosos por hacerlo; exposición pública de los menores cuyos padres no siguen las recomendaciones imperantes e impuestas; responsabilización de los menores por la salud de susmayores; criminalización de aquellos que no se someten... Si en la sociedad a. C. la buena educación incluía entre sus normas el respeto a las personas, sobre todo a las mayores, y el uso de palabras correctas en el lenguaje, con consignas como “no mientas”, “no insultes”, “no señales”; en la sociedad en transición no solo es frecuente criticar a quienes John Hain (Pixabay) Barreras invisibles impiden jugar y tocarse

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