59 OECCC a fin de repensar las convenciones internacionales de control de drogas, y, por consiguiente, la reclasificación del cannabis para sacarlo de la lista de sustanciasmás peligrosas. Sin embargo, la votación respecto del informe no llegó a consumarse en la 62.º reunión de la CND. La vulneración de los derechos fundamentales de miles de ciudadanos ha sido siempre una preocupación constante, y en este sentido concluía el OECCC, en la Declaración de Viena de 2019, “cinco medidas urgentes sobre el cannabis en Europa”: la regulación del uso y autocultivo, el cese inmediato de multas, cannabis medicinal integral, permitir la venta de productos alimenticios altos en CBD y THC inferior al 0,2 %, y la concesión de licencias con criterios claros y transparentes. La reclasificación del cannabis en los convenios fue una de las recomendaciones realizadas en la CND 63.º y esto se cumplió. Desde entonces, han aparecido avances (programas de cannabis medicinal e investigaciones que han aumentado las evidencias científicas para tratar trastornos, enfermedades e incluso para mejorar la calidad de vida), pero todavía queda mucho trabajo por hacer. Las pasadas ediciones tuvieron lugar con el compromiso reiterado de la UNGASS (1988) sobre el abordaje universal de las drogas, y se suponían claves, pues en ellas se iba a votar acerca de la reclasificación del cannabis. La continuidad del trabajo de las organizaciones de la sociedad civil es significativa. El GMAF (Grupo de Mujeres de la Argentina Foro de VIH Mujeres y Familia) en estrecha colaboración con el OECCC, contribuyeron con un written statement (en el que proponen cincomedidas urgentes para esta década), así como con un oral Continúan en muchos países los castigos, detenciones arbitrarias y discriminaciones a personas por la tenencia y autocultivo de su medicina paktaotik (depositphotos)
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