10 activismo Esta legislatura comenzó con una crisis sanitaria sin precedentes, generando una agenda política monotemática y la aparición de retos para la subsistencia del sector cannábico, como las visitas a grow shops, la sentencia sobre las licencias de Barcelona y numerosos procesos judiciales que ponen en tela de juicio las actividades de las asociaciones. Al principio de la legislatura, se enfocaron los esfuerzos, haciendo lo posible para que las asociaciones se mantuvieran abiertas y así continuó siendo en buena parte de la pandemia. Pese a las circunstancias, las organizaciones de la sociedad civil continuaron insistiendo en la importancia de una regulación, así que algunos partidos políticos sensibles con la materia comenzaron a trabajar en ello en el ámbito estatal. Una vez pasadas las primeras olas de la pandemia, se comenzaron a presentar iniciativas para regular el cannabis en ambas cámaras. La primera, en el Senado, impulsada por Geroa Bai desde el Grupo Izquierda Confederal, que se armaron de valentía y presentaron una propuesta que fue debatida y lamentablemente rechazada a finales de septiembre de 2021 en la Cámara Alta. Lo que no dejó pocos argumentos a relucir por parte de los grupos que no apoyan, por el momento, la regulación del cannabis. Después comenzó la carrera en el Congreso de los Diputados, siendo, de las tres iniciativas registradas, una tramitada de urgencia y rechazada, por los votos en contra de VOX, PP y PSOE a finales de 2021; otra retirada con posibilidades de volverse a presentar y la última retrasada para poder alzar a debate otra cuestión prioritaria para el grupo parlamentario, lo que Repaso de una legislatura convulsa para el cannabis y con el ojo puesto en los procesos electorales de 2023. Esta legislatura comenzó con una crisis sanitaria sin precedentes, generando una agenda política monotemática y la aparición de retos para la subsistencia del sector cannábico por ConFAC ¿Y el cannabis para cuándo? La eternaesperade la comunidad cannábica
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