El Cultivador

57 consejos de cultivo metropolitana de Barcelona el agua del grifo arroja un valor de 1,2 ms, que es el máximo aconsejado para la fase de crecimiento incluyendo el fertilizante. Por tanto, la más mínima adición de nutrientes para el riego hace que se supere este límite. Una solución a este problema es el agua destilada u osmotizada, que se puede mezclar con el agua del grifo para rebajar la electroconductividad total, o bien, emplearse para regar añadiéndole calcio y magnesio en las proporciones adecuadas. Exceso de riego. Este es otro error bastante común entre los autocultivadores principiantes. Aunque hay quien prefiere regar cada día con una cantidad de agua concreta, la forma más simple de hacerlo es cada varios días. Es decir, suministrar un riego y no volver a hacerlo hasta que la tierra se haya secado. Para saber cuándo ocurre esto es tan fácil como sopesar la maceta: si pesa poco, contendrá poca agua y por tanto será necesario regar. Si cultivamos en tierra madre, podemos saberlo solo con hundir el dedo en ella a una profundidad de un centímetro aproximadamente: si no la notamos húmeda, es momento de regar. Exceso o carencia de nutrientes. Otro error bastante común entre los cultivadores que empiezan en estemundillo es no detectar a tiempo el exceso o carencia de nutrientes. Esto es algo que puede tener consecuencias notables en el desarrollo del cultivo o el producto final. Posiblemente, la equivocación más común es confundir el verde oscuro de un exceso de nitrógeno con un síntoma de buena salud hasta que las hojas empiezan a tener una forma de garra muy notable. Si bien estas deben tener un color verde intenso, su tono no debería ser extremadamente oscuro a no ser que se deba a un rasgo genético. Con relación a los nutrientes, otro error que comenten algunos cultivadores más experimentados es suministrar suplementos de PK de forma abusiva, lo cual aumenta la producción a costa de una significativa reducción de la calidad. La calidad del agua […] es mala en toda la vertiente mediterránea de la península, acostumbrando a tener un pH elevado algunas variedades no están adaptadas a determinadas condiciones Los síntomas de sequía son muy parecidos a los del exceso de agua Mantener la frecuencia de riego es fundamental Algunas genéticas están mejor adaptadas que otras a determinados climas

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