El Cultivador

No obstante, el mal viaje tuvo un buen final, y tras haberse disipado esas primeras sensaciones más desagradables, Hofmann fue capaz de “volver a la realidad” renovado: "Después de cinco o seis horas volví de nuevo a la normalidad, y entonces realmente me lo pasé muy bien. Disfruté con la sensación de haber vuelto a nacer. Volver de un mundo muy extraño y encontrarme con el mundo cotidiano y familiar. Experimenté la belleza de nuestro mundo cotidiano, real. Todas esas cosas que uno no valora en estado normal me parecían bellísimas, me di cuenta de lo bonito que es nuestro mundo, y estaba realmente feliz. Y así fue cómo descubrí la LSD"1. Efectivamente, así fue cómoHofmann descubrió el compuesto psicoactivo más potente que ha conocido el hombre hasta esa fecha, con un alumbramiento doble, el de la LSD y, en sus propias palabras, el suyo propio a este mundo de los psiquedélicos. Las promesas de la LSD El nacimiento de la LSD fue un momento prometedor que inauguró toda una revolución, una era dorada de la psicofarmacología. Por supuesto, tan pronto como Sandoz fue informada del descubrimiento científico del suizo, trataron de meter mano en el asunto y lucrarse con la LSD. De hecho, fue Walter Stoll, hijo del director de la Sandoz, el que se apresuró en firmar la primera publicación científica sobre los efectos de la LSD en humanos. Sandoz comercializó la LSD como Delysid y la repartió a conciencia entre científicos e investigadores para que la probaran. Pero, ¿qué suponía exactamente el descubrimiento de la LSD? La LSD suponía, ante todo, una promesa de conocimiento, pues ofrecía la posibilidad de estudiar en profundidad aspectos del cerebro y su funcionamiento, que eran auténticas incógnitas. Con la LSD podrían alumbrarse las interacciones químicas que subyacen a los procesos mentales, y dar un gran salto a la investigación tanto en psicofarmacología, como en psiquiatría y psicología. Stanislav Grof, psicólogo checo que creó un modelo para trabajar con la LSD y los estados alterados de conciencia, y que se convirtió más tarde en uno de los fundadores de la psicología transpersonal, equiparaba el descubrimiento de la LSD para la psiquiatría y la psicología, con el descubrimiento del microscopio para la biología o la medicina, o del telescopio para la astronomía, y analizaba las posibilidades que inauguraba el hallazgo: “Dichas sustancias funcionan como amplificadores no específicos, que aumentan la catexis (carga energética) asociada con profundos contenidos inconscientes de la psique y la ponen a disposición del proceso consciente. Esta singular propiedad de los psiquedélicos hace posible el estudio de las corrientes subterráneas que gobiernan nuestras experiencias y comportamientos, con una profundidad que no puede ser igualada por ningún otro método u herramienta disponible en la psiquiatría o psicología tradicional”2. 39 pensamiento psiquedélico Sandoz comercializó la LSD como Delysid y la repartió a conciencia entre científicos e investigadores para que la probaran Pixnio, CC0, Pixnio

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