El Cultivador

24 cultura cannábica Tener la oportunidad de valorar extracciones para una competición, copa o evento es una suerte, un placer y siempre se agradece, aunque, también, una dura labor de concentración y un acto de respeto hacia las muestras y el trabajo que hay detrás de las mismas, así como hacia la organización y las personas que han puesto la confianza en mí para estas ocupaciones. He sido partícipe de cerca de una decena de eventos como jurado de rosiny no puedo hacer más que agradecer a quienes lo han hecho posible, crecemos y aprendemos en compañía y no hay duda de que cada vez vamos hacia mejores calidades. Es muy interesante y enriquecedor poder ver, olfatear y degustar como las tendencias cambian, tanto en como lucen las muestras, en la diversidad o el parecido aromático y en cómo existen sabores de todo tipo. La evolución no para. Tampoco paran de aparecer diferentes formas y superficies para dabear, pero en esta redacción nos centramos en cómo hacer una cata de rosin en pipas de borosilicato, sobre un slurperde cuarzo a temperatura controlada. Cada competición tiene sus particularidades, pero, por lo general, se evalúan la apariencia, el aroma, el sabor y, ya cada vez en menos ocasiones, el efecto. Empezamos este artículo tratando sobre los diferentes tipos de rosin, sobre los cambios de la resina antes de presentarla y sobre cómo evaluar el aspecto de las muestras. Rosin de flores frente a rosin de hachís Este es un tema complejo, que depende mucho de la organización de los eventos y, por supuesto, también de las posibilidades de los participantes para presentar extracciones de rosin de flores o hacer hachís y hacer rosin de ese hachís después. Partimos de la base, de que hacer rosin de flores que sea mejor que un rosin de hachís es muy complicado, aunque podríamos estar ante un rosin de flores espectacular, frente a un rosin de hachís de muy baja calidad. La evolución de las técnicas y, sobre todo, de la maquinaria destinada al lavado de flores ha sido muy rápida y la tendencia, tanto en otros países como aquí, es lavar nuestras flores y prensar después el hachís, preferentemente a hacer rosin de las flores. Para que un rosin de flores sea mejor que un rosin de hachís debe tener unas características que lo hagan superior y hay una que es muy complicado que lo supere, la limpieza al dabeary el sabor. Como ya he transmitido en otros artículos, cuando hacemos rosin de cogollos forzosamente estamos arrastrando, mediante la humedad, y la resina las ceras epicuticulares que recubren tanto las hojas, como las flores que forman los cogollos. Estas ceras están ahí para proteger los tejidos vegetales y esa capa más exterior de la planta, de la radiación y los agentes externos. Esto es importante, porque estas ceras y otros compuestos que se extraen en el rosin de flores no aparecen en el rosin de hachís (si el hachís es de buena calidad y la prensada ha sido correcta, obviamente). Por lo tanto, cabe aquí la discusión de si considerar solamente una categoría de rosin o subdividirla. En algunos casos, se hace una división y cada forma de extracción tiene una categoría propia, en otros, se deja a decisión de quién participa y en estos casos, por lo general, la cantidad de muestras de rosin de flores suele ser muy inferior a las muestras de rosin de hachís. Es entendible que alguien que se presente a una competición donde la categoría sea mixta, si presenta un rosin de flores debe de estar muy seguro de que es de muy alta calidad para poder destacar frente a quien presenta rosin de hachís. Cuando hablamos de rosin de hachís podría ser de cualquier tipo de hachís, es decir, una amalgama de tricomas rotos, junto con algunos tallos de tricomas, e incluso pequeñas partículas de material vegetal, bien hacer rosin de flores que sea mejor que un rosin de hachís es muy complicado Valoraciónde muestras de rosinpara una competición 1.ª parte Textura azucarada algo húmeda Muestra con textura más líquida y color más oscuro por A. Flores Verdes, macrohuana@gmail.com

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