Después de que se pronunciara de forma positiva Duterte su visión sobre el cannabis medicinal, ahora se debate en el Parlamento filipino
Ahora ha sido Filipinas, la nación más restrictiva en el ámbito de las drogas, la que ha llevado al Parlamento un proyecto de ley, que pretende legalizar el cannabis medicinal en el país. El proyecto, con el beneplácito de Duterte tras pronunciarse a favor del cannabis, está debatiéndose durante estas semanas en la cámara alta del país con un comité de expertos y científicos con los que se está contemplando todos los escenarios posibles para la legalización de la planta como tratamiento para enfermedades graves.
El proyecto de ley, llamado Compassionate Medical Cannabis Bill, ha sido llevado y propuesto al Parlamento gracias a uno de los representantes de Isabela, una de las provincias del país filipino, llamado Rodolfo Albano III que explicó ante sus colegas diputados:
‘El uso de cannabis con fines recreativos no se va a permitir y seguirá prohibido. No estamos proponiendo que finalice la prohibición con el cannabis recreacional. El cannabis seguirá considerada como una droga peligrosa. Estoy seguro de que este proyecto verá la luz en el mandato de nuestro presidente Duterte.’
Sólo se usarán derivados del cannabis como medicina para tratamiento para las enfermedades más graves
Albano, también explicó durante las ponencias, que de ninguna forma se comercializará o prescribirá cannabis en forma de flor, siendo distribuido en formas comestibles, en cápsulas o aceites que puedan ingerirse de una forma sencilla y saludable. Sólo se autorizarán formas en las que el cannabis sea procesado y no represente ningún peligro en los hogares del país.
Además, también están definiendo cuáles serán las enfermedades en las que se prescriban estos tratamientos cannábicos. Para ello, están utilizando todos los estudios científicos que están apareciendo a lo largo y ancho del planeta, que certifican los beneficios de la planta. Por el momento, figurarán enfermedades cómo el VIH, la esclerosis múltiple, la artritis o cualquier cáncer que se encuentre en su etapa terminal, junto a otras enfermedades con diversa sintomatología que representen condiciones medicas debilitantes.
Esperemos que la entrada en vigor en unos meses, de este plan que pretende normalizar el cannabis como medicina, contribuya a que Duterte suavice sus políticas contra las drogas, que ya se han cobrado más de 20.000 muertos en el país. Por el momento, habrá que ver si se aprueba y cómo funcionará.